Dinero, vanidad, religión, drogas, sexo, ideas… Cada uno nos nublamos la vista fumando nuestro propio Dios o creencia. Es difícil penetrar cuando se está tan anestesiado de la percepción de la realidad.
· Modelo | @moicamacho
· Foto & Retoque | @izaskunvalmaseda
· 2º Fotógrafo | @veb1970
· Asistente | @carmensbil
Cada fotografía de «Fúmate a tu Dios» utiliza el acto de fumar como un símbolo de la inhalación y absorción de estas creencias y obsesiones, mostrando cómo cada bocanada de humo envuelve y distorsiona la percepción. El humo, presente en cada imagen, representa la nube de percepción que cada «Dios|Creencia» crea alrededor de nosotros, haciéndonos cada vez más incapaces de ver con claridad.
La serie invita a reflexionar sobre nuestras propias obsesiones, cuestionando en qué medida permiten que estas fuerzas nublen la visión y anestesien nuestra comprensión del mundo. «Fúmate a tu Dios» nos desafía a examinar críticamente nuestros propios ídolos y a buscar una visión más clara y verdadera de nuestras vulnerabilidades.